Para ejercitar la posibilidad de hacer con las manos, la mente y la sorpresa.
Para abrir túneles de talento.
Para pensar e inventar con prontitud y facilidad.
Para formar nuevas ideas.
Para participar con ánimo intenso.
Para provocar acciones que mezclen nuestros sentidos al ver, sentir, tocar, probar, oler y armar.
Para adueñarnos de un espacio lúdico, libre y alegre donde convivir, comunicarnos, crear y cometer errores.